Que sí, qué no... (no sé qué quiero)
- Rosana
- 18 jul
- 2 Min. de lectura
“No sé que quiero” ¿Te pasa? Quizás tenemos más certezas de “lo que no nos gusta”, “lo que no queremos. A veces pasa que, tener en nuestras manos responsabilidad de decir "quiero tal y tal objetivo" ... nos cuesta. ☹

Un cliente me contaba que le aburría su trabajo, que no le gustaba, que con su jefe era una lucha constante. No lo valoraban, el sueldo no era bueno, no veía allí posibilidades de crecimiento. Todo, desde la queja. Que era siempre lo mismo. Que nada cambiaba. Que se había cansado de todo eso día tras día.
"¿Y cómo es ese trabajo que querés?" mmm.. (nada)"
¿Qué te gustaría que suceda en ese trabajo?" mmm... (nada)"
¿Qué características quisieras que tenga?" mmm.. (nada, de nuevo).
Cuando nosotros no decidimos "qué queremos", cuando no "elegimos"... otros (o la vida) lo hace en nuestro lugar.
Si queremos obtener esa claridad en los resultados que buscamos, en lo que sí nos interesa, en lo que queremos lograr, lápiz y papel para 3 tip´s que podemos aplicar:
1.Tus prioridades: ¿Qué es lo más importante (para vos)? Y son 3 o 4 ítems, no más.
Si lo llevás al trabajo: ¿qué es lo que sí o sí tenés que terminar / ocuparte en éste mes?. ¿y en ésta semana? ¿y hoy?
En esas respuestas estarán los elementos para contrastar tus decisiones. Lo que debiera estar en tu agenda. Lo que hará que digas sí o no, a todo lo otro que se vaya presentando como imprevistos.
2. Tus "no negociables" en tu trabajo. De nuevo, no son 20, son 5 máximo. Y te va a dar una idea de que no es “cualquier cosa”, ni todo te viene igual de bien.
Aquello que hoy te aporta valor. Aquello que sí querés que esté presente. Aquello por lo cual va a valer la pena estar realizando esa tarea, en ese lugar.
3.¿Qué te gusta hacer? ¿Qué es aquello que, cuando estás trabajando en eso es como que te abstraes del resto, te entusiasma? ¿Y lo que te sale fácil? En esas respuestas vas a encontrar algunos de tus “SI”, de tus dones, de tus habilidades, de lo que disfrutas. Luego habrá que ver cómo se unen (hay algunas herramientas interesantes, como el ikigai, ¿lo conocés?) que te pueden ayudar a encontrarle sentido.
Y algo más. Yo pienso que está bien aprender a convivir con los “no sé”, y si nos interesa, utilizarlos para explorar alternativas, para mantenernos curiosos, para hacer cosas distintas, para darnos permiso de probar. Porque quedarnos en la idea, tampoco nos sirve. Hay que llevarlo a lo concreto y así saber, si en nuestro hoy, están los SI de aquello que queremos.
¿Qué pensas vos? ¿Qué crees que podría ayudarte??